Franco no pudo aguantar la opinión de un Obispo sobre el uso
de los cultivos transgénicos e interrumpió una homilía.
El presidente designado de Paraguay interrumpió una homilía por no estar de acuerdo con las consideraciones expresadas por el Obispo Melanio Medina sobre el uso de los cultivos transgénicos. El mandatario dijo que no era capaz de apoyar un proyecto nocivo para la salud, mientras que monseñor prometió entregarle pruebas sobre el peligro de los productos.
El presidente de Paraguay, Federico Franco, interrumpió este jueves una homilía del obispo Melanio Medina, por ofenderse ante el rechazo del religioso al cultivo de semillas transgénicas, por considerar que son nocivas para la salud.
Medina aprovechó la presencia del presidente Federico Franco entre el resto de los feligreses para cuestionar el uso de semillas transgénicas, pidiendo que se analice bien la utilización de este tipo de biotecnología en los cultivos de algodón.
Sorprendiendo a los presentes, Federico Franco le pidió la palabra al Monseñor para explicar, según él, las ventajas de la utilización de este tipo de tecnología. Se levantó de su lugar y tomó el micrófono.
"¿Usted cree, monseñor, que si los transgénicos van a perjudicar la salud y el ambiente yo haría algo parecido?", aseveró el mandatario
El debate continuó en pleno oficio religioso al replicar Medina a Franco y señalarle que especialistas en la materia le habían asesorado sobre su significado nocivo, refrendado por numerosas declaraciones y protestas de campesinos e indígenas paraguayos.
El obispo anunció que, cuando tenga reunidos todos los documentos sobre el tema, pasará por la Casa de Gobierno para entregarlos a Franco, a quien pidió esperar a un estudio científico antes de desarrollar ese tipo de sembradíos en el país.

